22. A QUIEN CORRESPONDA

Señores Dueños del Mundo, En mi humilde condición de ser humano que habita éste, nuestro planeta, me preguntaba si podría hacerles algunas preguntas que me surgen de tanto en tanto. Quisiera aclarar que mi intención dista de ser presumida o maliciosa, más bien se trata de ignorancia en su estado más puro. En primer lugar, me intrigaba intimar los detalles de la negociación del contrato que les confiere ser o sentirse amos de la Tierra. Sin ánimo de descalificar dicho acuerdo, sería de gran utilidad conocer la persona o el ser supremo que les adjudicó dicho título de autoridad ya que indirectamente me ubica a mí y al resto de los humanos en súbditos. En segundo lugar, con respecto al contrato propiamente dicho, lo que se desprende a simple vista es que estaríamos frente a un tratado unilateral ya que los únicos beneficiarios serían Uds mismos, Señores Dueños del Mundo, pero me debo estar equivocando por desconocer los pormenores del contrato en cuestión. ¿Se trata de un acuerdo con fecha de finalización, o es indefinido? ¿Hay manera de postularse para el puesto, es por concurso o se hereda? Me gustaría conocer la finalidad del tratado ya que, teniendo en cuenta que estamos hablando de la vida misma del Planeta Tierra y de todo lo que en él se cobija, ciertamente no podríamos estar hablando de meras finalidades patrimoniales. En tercer lugar, y acá voy a pecar de utópica, ¡quisiera comprender! Eso es lo que más me gustaría, comprender cómo fue que llegaron a ser esto que hoy son. ¿Qué aspecto fenomenal de vuestra personalidad los convierte en superiores? Intuyo que son personas con grandes aspiraciones, gente muy ambiciosa con ideas claras. Y en cierto modo me alegro que estemos gobernados por Uds, Señores Dueños del Mundo, ya que necesitamos mentes diligentes, voluntariosas y vehementes. Pero, por favor no mal interpreten la dificultad que tengo de comprender, hay decisiones que toman que no logro entender. Debe haber un motivo sacrificado y desprendido de vuestra parte cuando deciden talar los bosques indiscriminadamente y dejar pulmones del globo en el más miserable estado desértico. Queda descartado que debe ser fundamental para la vida del Planeta que destruyan zonas enteras y las vuelen en mil pedazos para retirar de sus entrañas los recursos que precisan tan imperiosamente. La contaminación del agua potable, los suelos y el aire es otro aspecto que no me explico, pero de nuevo, me alivio pensando que quienes toman estas decisiones las toman pensando en el bien comunitario. ¿De qué otro motivo podría entenderse? La cuestión del calentamiento global, la lluvia ácida y el agujero de ozono, todo esto debe estar sustentado por principios fundamentales de leyes lógicas cuya única misión es la de salvaguardar y preservar el equilibrio del medio ambiente. De la misma manera, infiero que la caza indiscriminada no es otra cosa que la necesidad misma de asegurar la armonía entre las especies. Los derrames de petróleo, la radiación ionizante, los gases contaminantes y basureros a cielo abierto me tienen desconcertada pero Uds, Señores Dueños del Mundo, tendrán sus razones ya que sería absurdo y sumamente irracional suponer que hacen todo esto a sabiendas del irreversible daño que le hacen al Planeta Tierra y todos los que dependemos de él (Uds y sus familias inclusive). Sería absolutamente incomprensible creer que detrás de todo esto hay solamente gente egoísta, con apetito de codicia y poder. Gente que anhela lo que no les pertenece, que se manchan las manos con sangre, con aspiraciones demoníacas. Aborrecería descubrir que existen ambiciones tan perversas que permiten y fomentan el hambre y la enfermedad. Me daría asco saber que se trata de buitres rapaces que nos llevan a todos a la devastación de un Planeta que rebosa vida por donde se lo mire. Por lo que expuse en el párrafo de arriba, solicito con la presente, se me haga una aclaración que despeje mis dudas y de esta manera no sentirme lesionada en mis derechos como ser humano que precisa respirar oxígeno y beber agua, y que anhela con todo su corazón dejarle a sus hijos la dicha de disfrutar cada rincón de este hermoso planeta. Atentamente, Pajas Bravas

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